martes, 28 de abril de 2015

Cuarta etapa del Never Ending Tour


Etapa importante de mi Never Ending Tour (los dylanianos ya sabéis a qué me refiero). La cuarta ya. Supongo que esto es lo más parecido a una gira que podré vivir, salvo que me reencarne en el frontman de alguna oscura banda. Me acerco al micro y canto mi mensaje durante un buen rato (y a fe mía que el público escucha con atención); tengo una excelente mánager que me aconseja y cuida, contactos locales en cada etapa, escenarios a los que subir, teloneros, algunas veces, y sobre todo un repertorio que defender.
Fuera de bromas: en el LOCO Club de Valencia, el otro día, creo que me llegó algo de la energía del buen pop que en ese escenario se ha hecho. Está bien, lo admito, Zimmerman no ha tocado allí, pero sí lo han hecho, por poner dos ejemplos, los inmensos Graham Parker (memorable casette el que todavía tengo por ahí) y ese artistazo llamado M. Ward, uno de los grandes del momento actual. Algo de ellos y muchos otros recorrió mis venas mientras allí arriba, bajo los focos,  hablaba de surcos y vinilos y de los juegos del tiempo.

Mi Mal Evans particular a.k.a. el Gran Mariano filmó esto. Sí, vale, algo Mary Ann with the shaky hand al principio, pero no se puede pedir más con el modesto instrumental que el grupo tiene todavía.



jueves, 23 de abril de 2015

Más ecos


Hoy, 23 de abril, Día del Libro, EL SURCO ES EL ALMA DEL VINILO está de enhorabuena.Y por partida doble. 

Primero, la web de música y cine ESPACIO Woody Jagger hasce una verdadera disección del libro. 
No creo que daba añadir nada a lo que ha dicho su autor, Johnny JJ. Solo este comentario:  ha leído el libro con mucha atención, desde lo estrictamente literario, pero también desde lo musical. Porque tan importante como escribir bien es leer bien. Y hoy no es la fiesta de los autores: es, sobre todo, la de los lectores.

Así empieza:

...en un mundo donde se mezclan experiencias, donde los sentimientos, las emociones, las ilusiones, los recuerdos, el amor o la muerte conviven en un ciclo vital alrededor de los vinilos... 
Podéis leerla íntegra AQUÍ.

Y luego, a mediodía, el veterano Rafa Martínez, la voz de las últimas cuatro décadas en las ondas musicales gandienses, y actualmente director de Onda Cero Gandia me ha hecho esta entrevista en directo. Hemos hablado del libro, hemos compartido nuestra experiencia musical y creo que los dos hemos pasado un buen rato.

AQUÍ  podréis oír la entrevista.


Y ahora, calentando motores para la presentación en Valencia, mañana viernes.

Y de despedida, un poco de música. Wichita Lineman, un tema que popularizó en EE UU el cantante country, y actor (protagonizó el western  True Grit -Valor de ley- con John Wayne), Glenn Campbell, pero que yo prefiero en la versión de I Nomadi, un excelente grupo italiano, en activo desde 1963. El mítico Mogol, personaje importantísimo en la múusica italiana, lo adaptó para ellos, transformando el nombre original en "Un'auto corre lontana, ma io corro da te", o sea: Un coche corre lejos, pero yo corro para verte a ti. Vaya, Mogol estaba inspirado.
Comparad si queréis. Para mí que Los Nómadas superan a Campbell.


Aquí el vinilo donde lo tengo. Una recopilación de la EMI comprada en Roma, en 1969, por un hermano mío, aún con la etiqueta del precio pegada (1.500 liras) . Y suena magnífico. 

                                  

viernes, 17 de abril de 2015

Viernes 24 en LOCO CLUB




Rock 'n' Roll

Presentación “El surco del alma es el vinilo”

vinilo-makma
Ediciones Oblicuas tiene el placer de invitarles a la presentación en VALENCIA, de EL SURCO ES EL ALMA DEL VINILO, la nueva antología de relatos de Rafael Orihuel.
El acto tendrá lugar el viernes 24 de abril a las 20:15 horas en LOCO CLUB (calle Erudito Orellana, 12) y contará con la presencia del editor, Alberto Trinidad, que presentará el acto, y del propio autor, que se prestará a la habitual firma de ejemplares.
El surco es el alma del vinilo es una recopilación de relatos cuyo nexo de unión es el mundo de la música en su más amplia expresión. Un sentido homenaje tanto a los grupos y solistas como a los fans, a los dueños de tiendas de discos y al objeto en sí de reproducción, el vinilo.
Pero, además de eso, estos relatos son un excelente ejercicio narrativo que convierte la memoria de unos personajes arrebatadores en pequeñas joyas literarias. Con un estilo que nos recuerda a Roberto Bolaño por su habilidad a la hora de integrar diferentes biografías en narraciones apasionantes, Rafael Orihuel nos seduce desde la primera página, tanto como lo hace nuestro disco favorito una vez posamos la intangible aguja de diamante sobre el surco adecuado.
www.edicionesoblicuas.com
http://elsurcoeselalmadelvinilo.blogspot.com.es/

Y después de la presentación...  


 los míticos BRIGHTON 64 en concierto !!!

sábado, 11 de abril de 2015

Diario de un autor en busca de lectores



Tras Tarragona y Dénia, ayer en Gandia, ese lugar que no sin solemnidad se puede llamar mi ciudad natal. En el mismo edificio donde, a pocos metros de casa, mis cabellos fueron desde muy pronto sometidos a la tijera y la impaciencia de un peluquero cuyo nombre he olvidado (pero no su rostro severo), y en cuyos jardines tomábamos el vermú los días de fiesta (había un estanque con una rocalla y un surtidor en el centro, y esos peces rojos cuyos rápidos movimientos me fascinaban), allí conocí a nuevos lectores, personas a quienes tal vez las imágenes trasmitidas por la palabra, las impresiones, los nombres, los sentimientos expresados en el libro instiguen, en un diálogo silencioso y lleno de misterio, otras tantas.
Al escribir esto, me acuerdo de un personaje muy especial del que tuve noticia hace unos cuantos años, un músico irlandés ciego, Turlough O'Carolan, compositor de las más bellas piezas para arpa celta en el siglo XVIII, un músico ambulante que se ganaba la vida viajando a caballo por toda Irlanda, animando bodas y celebraciones. Los Chieftains le dedicaron un disco maravilloso, quizá el mejor de su carrera, acompañados por una orquesta de Belfast (escúchalos si no los conoces, lector ocioso que has entrado aquí; ¡pardiez, no dejes pasar otro día más de tu vida sin oír al grupo del gran Paddy Moloney!) Compuso una pieza llamada Oda al Whisky, que puede dar una idea de su gusto por el alcohol (un santo bebedor, sin duda) pero a mí me impactó una dedicada a una mujer con motivo de su boda, Madame Cole, de la que al parecer Turlough (Edward en gaélico) estaba enamorado. Se cuenta que décadas después de haber besado -siendo ya ciego- su mano, le bastó volver a tener esa mano entre las suyas para reconocerla. Antes de morir tuvo el temple de componer una pieza desgarradora, terriblemente hermosa, llamada Carolan's Farewell to Music: la despedida de la música de Carolan.
Me siento un poco O'Carolan. Viajando a lugares que son míos, aunque de distinta forma (si bien los lugares los lleva uno consigo y al final todos acaban siendo el mismo), y hablando de las historias que he creado. Ayer, un lector al que ya conocía, aunque no le he tratado mucho, me hizo ver ciertos ecos de Wittgenstein, nada menos, en uno de los relatos. La concisión del Tractatus versus la concisión de la descripción de un personaje. Me sorprendió, y me sentí muy halagado. Que el protagonista del relato hiciera una tesis sobre el filósofo vienés no es gratuito. Esas decisiones, cómo viste, qué lee, qué escucha, etc. un personaje, nunca lo son, y a menudo, esconden claves personales. Leí hace años, tal como le dije al bueno de K., una excelente biografía de Ludwig Wittgenstein, en mi opinión uno de los personajes más interesantes que ha dado el siglo XX.
Lo pasé bien en Gandia y Paco Sanz, director del grupo Radio Gandia-SER, me hizo una excelente introducción, aunque, como le ocurre al protagonista de American Tune (Una canción para el Sr. Morant) volví a sentir como “mi” Gandia de siempre se va desdibujando: Filatelia Alborch cerrada y en venta, por no mencionar otras tropelías, como el cierre de Tano, o Ausias convertido en una cafetería (me pregunto qué habrá sido de aquel probador que era una cabina de teléfono inglesa), o el propio Fomento sin la vieja sala de los sofás y butacones tras las cristaleras desde donde los viejos socios contemplaban la calle San Francisco de Borja.... Tempus fugit.
Y ahora pensando en Valencia, a donde llegaré, impulsado por el arpa del gran O'Carolan, el 24 de abril. En el LOCO Club (excelente nombre para hablar de literatura) conoceré a gente para los que, tal vez, algo de lo escrito en la bendita y creativa soledad de mi mesa de trabajo, les abra una pequeña chispa, un ínfimo relámpago, en su mente.

Os dejo con O'Carolan.


Y esta es la entrevista que me hicieron en Radio Gandia SER, en el magazine Hoy por hoy. La escucharéis  AQUI , en Soundcloud, desde el minuto 19. 


Dejo también unas fotos. Como decían (creo) en El Cielo sobre Berlín, si no hay una foto tuya es que no existes.